sábado, 15 de octubre de 2011

Etapa 9. Viernes 7 de octubre de 2011. Olveiroa - Finisterre

Después de cantarles durante toda la noche, a las parejas de portugueses con los que hemos compartido techo el lp completo, por ambas caras, el cd de "Los sonidos del silencio", nos levantamos a las 8:30, como unos señores, que hoy tenemos una etapa corta y es la última.

Los portugueses se fueron cuando todavía era noche cerrada. Quizá por no cometer un asesinato en el extranjero, que queda un poco feo.

Desayunamos tranquilamente y lo que parecía cansancio al levantarnos, no hace mella. El tiempo y el paisaje simplemente ESPECTACULARES. 

Además, el saber que es una etapa de unos 40 km hace que la cabeza funcione mejor. Hay subidas leves y bajadas interesantes. Las disfrutamos a tope. Mucha gente, casi en romería. Algunos incluso de vuelta. Llega la costa y todavía el paisaje es más bonito. Hacemos fotos y alguna enviamos por correo al momento. Ventajas que tiene la técnica actual.

Lleganos a Finisterre sobre las 14:00 pero hay que subir al faro. Nos quedan 3,5 km de subida. Los hacemis mientras un espontáneo, al ver el esfuerzo, cargados como íbamos, nos aplaude en un tramo.

Llegamos juntos arriba, aunque el Sr. Paniagua está más fuerte, pero decide esperarme. Nos abrazamos. Hemos llegado. Fotografías varias y volvemos, que hay que buscar alojamiento, comer, ducharse, descansar, ir a por la Finisterrana y cenar.

Nos alojamos en una pensión-albergue muy recomendable: Finistellae. Comida en el puerto y cena en O Centolo, enfrente del albergue municipal, en donde hablamos con el dueño, bueno, pareja de la dueña, de lo divino y de lo humano y de la carta de vinos. Sitio también muy recomendable. Sabe un "guevo" de Alvariños.

Ahora solo queda ver a Pedro y a Yolanda que han sido tan amables de conciliar trabajo-ocio con empresa de transporte y son los que nos van a devolver a la rutina madrileña.
Gracias. Un abrazo para ellos y para todos los que no nos han podido acompañar esta vez, que seguro que les hubiera gustado. Y a Carlitos en especial para que se mejore pronto.


Etapa 8 Jueves, 6 de octubre de 2011. Santiago de Compostela - Olveiroa

Es un poco extraño, porque habiendo llegado a Santiago, aún nos quedan dos etapas. El albergue de San Lázaro es muy recomendable, nos vamos, no muy pronto... 

Pasamos por la plaza del Obradoiro y salimos por la calle que sale al lado del hostal Reyes Católicos.

Enseguida se sale a un bosque. Hay niebla y algo (retomo el correo por la mañana porque me quedé tieso ayer antes del paréntesis) de frío pero se camina bien.

El día no puede ser mejor, no hace calor, el cielo semicubierto, bosques y más bosques. El único inconveniente, por poner uno es que nos hemos tenido que bajar a empujar 20 ó 25 veces. Eso nos ha agotado. Hemos parado a comer un bocata y hemos charlado un buen rato con una irlandesa muy simpática que lleva un mes caminando. Nos hacemos fotos y nos despedimos. Luego hemos aguantado a base de acuarius y chocolate.

Para colmo no había alojamiento en Olveiroa y hemos tenido que retroceder para poder dormir bajo techo.
 
Bien,  porque  el pestazo a vaca del pueblo entero era casi insoportable y aquí hemos estado muy bien, a solo 1,6 km. Están en pleno riego de campos con abonos. Eso no se arregla ni lloviendo Chanel nº 5 durante dos meses.


Comentario de Mamá Pata y patitos
... Se debe hacer muy raro tocar pared en Santiago y continuar cuando habeis terminado ya tantas veces (que ya van unas cuantas)  el camino allí.
 
Espero que cuando llegueis a Finisterre no quemeis las bicis ... solamente las zapatillas ...
 
 
¡¡¡Seguís siendo unos campeones!!! ... Enhorabuena y besos

Etapa 7. Miércoles, 5 de octubre de 2011. Sobrado Dos Monxes - Santiago de Compostela

Ayer por la noche, después de cenar, vimos que abrían a las 8:30, para desayunar, así que especulábamos con la mejor hora para poner el despertador. Las 7:45 parecía buena hora. A las 22:00 viene kurosaba, el monje japo (no soy japo, soy coreano, puso en el libro de visitas, pero podía pasar por japo). Buenas noches, good night, mañana a las 7:30 gran fiesta. Apaga y se va. 

Un rato después, cuando estábamos en el mejor sueño: Buenos días, good morning, son las 7, a las 7:30 empieza la misa...

El Sr. Paniagua dice, ¡la madre que le pario, no me levanato hasta que no me traigan a la cama el café y los churros!. ¡Y qué coño hacemos a estas horas los ciclistas si no se ve y no hay nada abierto....la madre que le parió al japo!

Joder, dice un ciclista gallego, y ¿dónde está la fiesta?. ¡Nos han engañado!.

Me dice el Sr. Paniagua, vete al otro baño, que aquella alemana te quiere apedrear del concierto que has dado esta noche.

La alemana, como venganza nos deja la puerta abierta y como el japo nos puso de maeses porteros pasa un frío del carajo.

Total que salimos antes de las 8:00 con idea de que todo estuviera cerrado. Afortunadamente a la salida del monasterio nos estaban esperando dos croasanes familiares y sendos cafés.
 
Nos vamos. Hace frío porque hay una niebla densa que nos cala los huesos.

Tiramos hacia Santa Irene, como estaba previsto. Buen firme, alguna subida ligera y buen ritmo.
 
A las 11:30 habíamos hecho más de media etapa y casi habíamos llegado a enlazar con el camino francés.
 
Luego, con el calor y el cansancio acumulado, se nos ha hecho más lento y tedioso.
 
Paramos para comer un bocata y llegamos a Santiago antes de las 15:00, lo cual nos permite lavar, descansar, ir a por la Compostela....
 
Estamos cansados y con la sensación rara porque hemos llegado pero aún nos faltan dos etapas.

Comentario del Sr. Fernández Pastor


¡Corre, Forrest, corre!

Etapa 6. Martes, 4 de octubre de 2011. Gontán - Monasterio de Sobrado Dos Monxes

Después de facturar a Carlos y a su bicicleta para Madrid pensamos en rehacer las etapas. Desde Abadín hasta Sobrado dos Monxes hay más de 80 km y andamos justos de fuerzas después de las subidas de los días previos y del calor.

Decidimos madrugar y nos sorprende mucho dejar a todos los andarines en la cama. Solo hay otra pareja de portugueses que se atreven. No se ve. Vamos a desayunar y a las 8:20 empezamos la ruta, con las primeras luces.


Hasta Villalba por carretera. Al pasar por encima de los ríos la humedad nos cala. Vemos varios cementerios neo-góticos. Pasanos por camino, carretera, bosques de eucaliptos, castañares, robles...


Paramos en Bahamonde. El albergue espectacular. Nos recomiendan, y recomendamos, el bar "A rotonda". Pedimos tortilla. Lástima, no hay. Bueno lomo con tomate. Bueno, pues el paisano nos viene con un bocata con 6 pisos de lomo y otros 6 de tomate. 


Dice el Sr. Paniagua que si llega a hacer tortillas francesas tiene a las gallinas haciendo horas extra para tener huevos suficientes. 

Los dos bocatas y tres botes, 8,60 €. Alucinante.
 

Total, que con semejante artillería nos presentamos en Sobrado dos Monxes a las 18:30 más o menos,después de pimplarnos 83 km, los últimos 10 ya tocados.
 

Nos alojamos en el monasterio, tras las indicaciones de un fraile japo, que luego resulta que es coreano.

Comentario del Sr. Fernández Pastor

¡Estáis fuertes como el Coloso de Rodas! Nada os detiene. Seguid asín... 

Etapa 5. Lunes, 3 de octubre de 2011. Lourenzá - Gontán (Abadin)

Hemos madrugado en Lourenzá. A las 7:30 estábamos arriba para intentar no pasarlas demasiado canutas uniendo subida+calor. 

El paisaje de Lugo ya lo conocemos del Camino Primitivo. Por aquí también es espectacular y para que así sea es a base de siempre lo mismo: por cada 10 segundos de bajada, 10 minutos de subida. 


En un pueblo de 13 habitantes, una señora nos ha llenado los tanques y nos ha indicado la ruta.
 

Lástima, en menos de 10 km, en Gontán, bajando, Carlos se ha encontrado con un mosquito de Bilbao. 

Resultado: clavícula rota, bici camino de Madrid por MRW, y él por tren, autobús o avión, lo que más cuadre. Del bicho no os puedo dar referencias. Estará celebrándolo con los colegas presumiendo de haberse cargado a un ciclista.

Ya le he dicho a Carlos que el insecto estaba contratado. Era muy humillante que un primerizo nos sacase 20 cuerpos en cada cuesta.
 


Nos quedamos en el albergue, que está muy bien, primero esperando noticias y luego confirmando lo que indico más arriba. Carlos estaba disfrutando.... qué se le va a hacer. Al Camino hay que venir con la idea de tener que volver al siguiente día por cualquier cosa. Habrá otras oportunidades. Seguro.

Está claro que el Sr. Paniagua y yo empezamos o acabamos los caminos en pareja....

Comentario del Sr. Chapas
 
Pero bueno, ese hoooooombre, que se ha roto para siempre! ¿No quedamos en que cuidabais de Carlos como si fuera un hijo? ¡Qué digo un hijo, una hija adolescente que va a su primer baile! Maldita sea.

Tengan Uds. sumo cuidado en las etapas restantes, que ya hemos preparado el viaje para ir a buscarles y no queremos renunciar al paseo.

Abrazos.

Pedro

Comentario de la Sra. Martín Cordero


¡¡¡no sabeis la envidia que me dais!!! aunque solo hace 2 meses que estuvimos por allí ... ¡¡¡se me hace eternos!!!
 
... y debeis decir la verdad ... ¡¡empujasteis a Carlos para quedaros solos!!!!
 
Besos y que no sufrais mucho (aunque parece que el sufrimiento se os olvida en cuanto os tomais una cervecita)

Etapa 4. Domingo, 2 de octubre de 2011. Tapia de Casariego - Lourenzá

Como la noche en Tapia ha sido de pensión y la etapa va a ser de menos de 50 km (me paaaarto, parecía fácil) retrasamos la salida media hora, como unos reyes. 

El día ya es caluroso cuando salimos. Preguntamos a un ciclista de 76 años como salir. Nos vamos a dar otro lujo: ir por el GR-9 en vez de la ruta oficial para bordear playas y acantilados que nos obligan a hacer más km. Pero que merecen la pena por la belleza de los paisajes. Total que tardamos más de 2 h en hacer 11 km. que nos separan de Ribadeo. 

Vamos... ¡como para hacer etapas de 100 km!

Tomamos una Estrella con tapa de callos y empezamos a subir cuestas hasta un punto maravilloso, no sé donde, en el que aparece el bar Casa Dapena. Son las 14 h. A la izquierda el bar, a la derecha una cuesta sin fin. Nos quedamos a comer.

De primero fabes, el clásico. De segundo hay lengua. Han dejado mudas a todas las vacas de Lugo. Qué animalitos poniendo de comer.
 
A las 16 h nos vamos. La primera idea es tirarnos en un prado, pero no podemos poruque no hay tiempo. Hay 50 grados a la sombra y aquí patentaron solo cuestas arriba para penar y cuestas abajo para frenar. 

Al final de una de ellas, de las de empujar, en la iglesia del Carmen, hay un grifo de agua fresca. La de los botes sirve para echárnosla por la cabeza.

Seguimos para bingo y llegamos al albergue de Gondan. Afortunadamente el Sr. Paniagua tiene que deponer su actitud y nos permite tumbarnos encima de un banco de piedra. 

Estamos agotados por el calor. Seguimos. Desde aquí nos quedan 15 km a Mondoñedo y 7 a Lourenzá. Son las 18:40 y nos tiramos más de 20 m. Empujando por una pendiente inmisericorde. 

Decidido, nos quedamos en Lourenzá. No nos da más de sí la pelota.
 
Nos alojamos, aseamos...Además están de fiestas y las acabamos de aprovechar oyendo a una super orquesta de gaiteros en la iglesia-monasterio del pueblo y degustando una de pulpo y una de lacón con unas Estrellitas. No se puede pedir más.


Comentario del Sr. Chapas

Mis admirados y sufridos bicigrinos.

Observo con alborozo que vais cogiendo las formas (la física de poder con las cuestas y la otra física de poneros orondos). No os acomplejéis por nada, seguid así, que tiempo de arrepentiros, si es que fuere necasario ya tendréis a la vuelta a casa.

Hemos hablado hoy con Jaime que nos ha confirmado que el calor reinante en Asturias se está irradiando hacia el norte, con lo que ellos lo han notado en Londres, donde han subido las temperaturas hasta los 35º. Lejos todavía de las que vosotros soportáis con tanta entereza, pero igualmente sorprendentes en esta época del año.

De todas formas, por la experiencia acumulada, casi me atrevería a decir que preferís sudar un poco las grasas de las lorzas que no sufrir la criogenización de vuestros cuerpos por el frío y la lluvia. Eso ya lo hemos pasado también y preferimos pedir muerte, qué duda cabe.

Tomad instantáneas en cuanto os sea posible, incluso cuando no lo sea. Ensayad a meter la mano en el bolsillo para sacar el teléfono y tomar la foto sobre la marcha, que las de "autor y exposición" tendrán que ser cuando os motiven los encuadres y en esos instantes no tengo nada que oponer, más bien disfrutar cuando tengamos la oportunidad de ver las imágenes en unos días.

Ánimo, que superado Tapia ya es todo cuesta abajo hasta Santiago.

Abrazos,

PiterChapas


Etapa 3. Sábado, 1 de octubre de 2011. Cadavedo - Tapia de Casariego

Salimos de Cadavedo con la sana intención de desayunar en algún sitio, pero tardanos en encontrar el único bar que hasta el momento nos ha sableado, antes de Luarca, a la que accedemos por escaleras. 

Muy bonita y muy empinada esta población. Nos tomamos unos productos típicos en la plaza, que está llena de tenderetes. 

La salida es de echar el "bofe". No hay mucho que decir de esta etapa, salvo que en la pensión Cantábrico de Navia se come como Dios. No nos podemos resistir a un menú de Fabes y de merluza a la plancha. Conversamos con un hospitalero que nos cuenta sus batallas y nos dice que algún marine de Cantalapiedra hace 160 km por etapa. No sabemos si es marine o de Cantalapiedra, pero parece que se ha pasado un poco...

Seguimos un buen tramo por carretera, de vez en cuando volvemos al camino.... Tiempo excepcional, quizá mucho calor, pero es la tónica de estos días. 

Llegamos a Tapia de Casariego por una playa muy bonita en la que está el albergue. Cerrado. Nos aconsejan una pensión, sin nombre, como los vinos sin etiqueta, en la que tenemos todo tipo de comodidades.

Salimos al puerto, pero no cenamos en "La Marina", que es donde nos había aconsejado Juan, sino en otro ubicado más arriba, que no ha estado nada mal.

Precioso sitio...

Etapa 2. Viernes, 30 de septiembre de 2011. Avilés - Cadavedo

Avilés nos despide después de un desayuno con bollo casero y vuelta por el casco antiguo. Con un poco de lío llegamos a Salinas, cuna de los Grandes. 

Llamamos a Yolanda para decirle que estamos en ese pedazo de playón de su pueblo. La gente pasea o se mete al agua con las tablas...

Llegamos a Muros de Nalón y nos indica un labriego como seguir. Comemos unos bocatas y una de fabes a compartir en la playa de la Concha de Artedo, Bar-Pensión San Miguel. 

La playa es para estar allí todo el día, que si una de navajas, que si otra de chopitos, que si un cubata... Así sin parar, pero tenemos que marcharnos, empujando, por cierto. El paisaje es típico asturiano. 

Juan nos recomienda ver la playa del Silencio y Carlos no lo puede dejar pasar. Se baja, se despelota y al agua. No es por no bañarnos, es por no bajar a la playa que está en la planta -20, así que nos quedamos contemplando el paisaje y esperando.

Llegamos a Cadavedo, vemos el cutre-albergue y decidimos quedarnos porque  tenemos una habitación para nosotros solos y parece que la fauna local no se mueve mucho. Luego no sería así.
 
Nos vamos a cenar al bar El Casino, después de que un parroquiano del bar donde nos metemos primero nos indique, ya que la siesa de la tabernera no nos hace ni un bocadillo.

El menú lo completamos con un antojo: patatas al cabrales. Nos avisa la niña que nos sirve..."no os vais a comer el menú, vosotros veréis".

Cuando nos trae el primero nos quedamos ojipláticos. Al llevarse más de la mitad le digo al camarero si con lo que nos ha sobrado dan de comer al día siguiente a todo el colegio. Se medio ofende y dice que el cliente paga y tiene que quedar satisfecho. Vale, pero si ya con el primero salimos rodando, nos da miedo qué parte del brontosaurio va traer de segundo. 

Efectivanente, sobre una capa de kilo y medio de patatas, un filete que lo cubre todo, y para Carlos, le han quitado la cabeza y el rabo al bicho y junto con una tonelada de garbanzos pretenden que se coma esos callos. 

De aquí teníamos que ir a cortar árboles con las manos, para bajar semejante menú, pero preferimos roncar junto a las arañas.

Alguna se pone cariñosa con Carlos y se levanta con varios picotazos y tan contento.


Etapa 1. Jueves 29 de septiembre de 2011. Gijón - Avilés.

El viaje de ida desde Madrid se hace cómodo. Salimos por la mañana. La furgoneta, perfecta. Caben hasta 6 personas y 4 bicicletas y se conduce como un turismo. Damos alguna vuelta por Gijón para dar con el aparcamiento. Lo bueno es que la salida hacia Avilés con las bicicletas ha sido fácil. Hemos decidido hacer una mini-etapa de 26 km. para empezar mañana en Avilés.

Nos encontramos con una señal que pone: recto para bicis, a la izquierda para ciclotalibanes. 


Tiramos a la izquierda. Cuando estamos a punto del soponcio por la cuesta aparece una señora ofreciéndonos agua. Bendita sea. Más adelante nos desviamos 1 km pata ver el dólmen de San Pablo, Santo Tomás... o de algún santo: 4 piedras.

Acabábamos de dejar Gijón por una salida bastante fea y ahora estábamos disfrutando de un paisaje precioso y con una luz....

Más adelante sin pena ni gloria llegamos a Avilés y nos alojamos en el albergue, de 5 categoría, pero en el que afortunadamente hay poca gente.

El día termina con un tapeo en el casco antiguo de Aviles, en "la araña". Sitio al que hay que volver recursivamente aunque sea con el pensamiento.

Comentario del Sr. Fernández Pastor


Que aproveche, Majestad, que los esfuerzos nos juegan malas pasadas en forma de desfallecimiento o pájara (Que de esas ya conoce alguna).

Descanse y reposen que se lo tienen bien merecido.

Permítame un licencia: ¡Qué puta envidia cochina me están dando ustedes!
Un abrazo y Buen Camino.